Aprovechar de una casa más pequeña con la jubilación 

Mudarse a una cas más pequeña tras la jubilación es siempre un reto, pero es más difícil cuando los espacios son pequeños y limitan las opciones. Ya sea que este cambio se realice por sí mismo o con la ayuda de la familia y amigos, aquí mostramos cómo hacer la transición más fácil y más cómoda, así como las ventajas que esto supone.

La situación de muchos jubilados es la de disponer de bajos ingresos, por lo que vender la vivienda habitual y mudarse a una casa o piso más pequeño puede ser una solución para disminuir los gastos y disfrutar de una mayor calidad de vida, además, si no se dispone de tanto dinero ahorrado como se había planeado, mudarse a un hogar más pequeño podría ayudar a jubilarse empezando por el buen camino o incluso evitando que se tenga que trabajar a tiempo parcial mucho después de haber dicho adiós al empleo a jornada completa del que se disponía. Las ventajas que se pueden obtener son:

Pagos de hipoteca más bajos:

Dependiendo de la venta de la casa habitual o de los ahorros de los que se disponga, es posible que se pueda dar un pago inicial sustancial al comprar una vivienda más pequeña. Si ya se ha pagado la propiedad, se puede incluso comprar la nueva casa directamente, eliminando la hipoteca por completo y liberando decenas o incluso cientos de euros al mes.

Reducir los impuestos sobre las propiedades:

Dado que muchos de los impuestos se basan en el valor de la vivienda habitual, comprar una casa o un apartamento más pequeño puede reducir sustancialmente los impuestos.

Menor gasto en las facturas de los servicios básicos:

generalmente, las casas grandes generan grandes facturas de luz, agua, gas y otros servicios. Aunque la forma de vivir influye bastante, si una casa está bien aislada y tiene equipos electrodomésticos eficientes, es probable que se pague bastante menos.

Disminución del precio del seguro del hogar:

cuanto más metros cuadrados tenga la vivienda, probablemente se pagará más prima que si se vive en una casa mucho más pequeña. Sin embargo, otros factores como la localización y la antigüedad de la casa también determinan el valor del seguro, así que se debe investigar cuál será el seguro de hogar antes de cerrar la compra de una nueva casa aunque sea más pequeña.

Menores costes de mantenimiento:

Al mudarse a una casa más pequeña, se podrá ahorrar una buena cantidad de capital sólo en el mantenimiento (reparaciones, decoración, jardinería…).

También hay que tener en cuenta que, si se decide vender la casa habitual en el centro de la ciudad para mudarse a una vivienda más pequeña, habrá que deshacerse de algunos objetos o guardarlos, por lo que un guardamuebles, trastero o almacén puede ser una buena opción para atesorar aquellos objetos con mayor valor sentimental que no se quieren perder y conseguir una vivienda más cómoda y funcional.